Primero
me engatusó
con sus artimañas
Después,
cuando comía
de su mano,
me robó
el corazón.
Por último,
huyó muy lejos,
a un lugar
donde resultase
imposible
seguir
su rastro.
9 fragmentos de LLAVES PARA UNA REVOLUCIÓN
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¡Ay de quien cierra la mano y retiene en lugar de albergar!
No sabrá de la belleza de regalar libertad.
*
Nacer arroyo, aprovechar los arroyos que ...
Hace 3 horas
Que hijaputa......
ResponderEliminarLo mismo me ocurrio a mi, pero era hijoputa.
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